Por la inmensa gracia de Bhagavan Sri Sathya Sai Baba, los devotos del Consejo Global Sri Sathya Sai de Nueva Zelanda tuvieron la bendición de ofrecer Grama Seva durante su peregrinación a Prashanti en 2025. Basada en el mensaje eterno de Swami: «Amar a todos, servir a todos», la iniciativa se constituyó en una sincera expresión de amor en acción, ofrecida con humildad y gratitud a Sus Divinos Pies de Loto.
La iniciativa se arraigó en la auspiciosa ocasión de Guru Purnima (julio de 2025), cuando comenzaron la planificación y la interacción entre las aldeas, basadas en la oración. Por la gracia de Swami, se identificó un grupo de aldeas: Narayanapuram, Bandlapalli, Vannurappalli, la Colonia Kammavari Palli, Obuladevara Palli y Locharla, que abarca casi 450 hogares y afecta la vida de unos 2000 aldeanos.
Para atender una necesidad clave de la comunidad, se instaló una planta de filtración de agua en Narayanapuram para proporcionar agua potable segura y sin flúor a toda la comunidad. La instalación fue inaugurada por el Sr. RJ Rathnakar, Fideicomisario Gerente de Sri Sathya Sai Central Trust. Manteniendo el énfasis de Swami en la educación, se distribuyeron mochilas escolares y material escolar a los niños con cariño y ánimo.
Se organizó un campamento médico integral que ofreció chequeos médicos generales, pruebas de detección de diabetes y atención oftalmológica y dental. Gracias a la gracia de Swami, 110 aldeanos recibieron atención médica y medicamentos gratuitos. También se llevó a cabo un campamento veterinario para apoyar la salud del ganado y los medios de vida rurales, y se distribuyeron sillas de ruedas a personas mayores y personas con discapacidad para facilitar su movilidad.
Con el espíritu de Narayana Seva, se distribuyó Amrutha Kalasam —que contenía víveres, frutos secos y ropa— a familias de todas las aldeas, reafirmando la verdad eterna de Swami: servir al hombre es servir a Dios.
Varias iniciativas también fortalecieron el tejido espiritual y comunitario de las aldeas. Se brindó apoyo para reconstruir el Templo Sri Rama en Vannurappalli e instalar nuevos ídolos. En Obuladevara Palli, se construyó un refugio permanente para facilitar las clases de Bal Vikas y las reuniones devocionales. El Kalyana Mandapam en Locharla, construido originalmente por Bhagavan hace casi 25 o 30 años, fue completamente renovado y regalado con cariño a los aldeanos, preservando así su legado divino. Además, se donaron instrumentos de bhajans y un sistema de sonido al Centro Sai para apoyar las actividades devocionales regulares.
Con las manos juntas y un corazón agradecido, el Consejo Global Sri Sathya Sai de Nueva Zelanda ofrece este Grama Seva a Sus Divinos Pies de Loto, orando para que Swami continúe guiando a todos en el sagrado camino del Amor, el Servicio y el Sacrificio.


